Barcelona es una ciudad que, pese a ser una urbe cosmopolita por excelencia, sigue manteniendo una cultura muy arraigada de la cual participan la mayor parte de los barceloneses. Prueba de ello son las fiestas de sus distintos barrios que congregan a gente de toda la ciudad y de los alrededores o sus señas de identidad que son ya célebres como las sardanas o los castellers. En este post conoceremos más de cerca una tradición muy curiosa de la ciudad.
Los gigantes son figuras de grandes dimensiones que representan nobles o personajes tradicionales catalanes. Son un elemento esencial en las fiestas populares alrededor de Catalunya que a menudo representan a los antiguos benefactores de la localidad. La altura desproporcionada es su característica principal.
La primera referencia que se tiene de los gigantes data del 1424, tratándose de un Goliat que participó en una procesión del Corpus. También se sabe que vivieron un periodo de decadencia, hasta llegar a la desaparición. Afortunadamente, la tradición volvió para quedarse en 1601.
Actualmente, la ciudad de Barcelona cuenta con una pareja de gigantes: Jaume y Violant. Fueron creados en 1992 y sus ropajes actuales datan del 2006. Estas dos figuras son una interpretación de dos importantes monarcas catalanes.
La música tradicional siempre acompaña a estos gigantes, que además cuentan con un baile propio en tres partes. En la primera se conocen y se saludan, en la segunda se cortejan mutuamente y en la tercera celebran su amor.
Si quiere saber más sobre la cultura catalana, Barcelona City Tour le invita a recorrer la ciudad condal en su autobús turístico con el que descubrirá los lugares emblemáticos de Barcelona al mismo tiempo que se empapa de la historia y costumbres de la metrópoli. Además, el Palacio de la Virreina se sitúa a menos de 10 minutos andando desde nuestra parada de Plaça Catalunya, que se encuentra tanto en la Ruta Este como en la Ruta Oeste.
